Qué es un plan de igualdad en una empresa y cómo elaborarlo
El desarrollo y aplicación de un plan de igualdad es una de las obligatoriedades legales de las empresas dentro de la garantía y el compromiso por la igualdad de género entre trabajadores y trabajadoras. Así, el plan de igualdad establece una serie de medidas y acciones que buscan disminuir la discriminación por razón de género, además de promover y respetar la diversidad en la empresa.
Marco legal del plan de igualdad
El Real Decreto-ley 6/2019, de 1 de marzo, de medidas urgentes para la garantía de la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres en el empleo y la ocupación, establece la obligación para las empresas de 50 o más personas trabajadoras, o en aquellas donde se establece en el convenio colectivo, de realizar y registrar el plan de igualdad. La ley establece los apartados que el plan debe tener, además de crear el Registro de Planes de Igualdad de las empresas.
Posteriormente, el marco normativo se ha ampliado con las leyes que hacen referencia al plan de igualdad y a la no discriminación en materia laboral:
- Real Decreto 901/2020, de 13 de octubre, por el que se regulan los planes de igualdad y su registro. Esta ley regula los mecanismos en la elaboración, negociación e implementación del plan de igualdad, así como la elaboración del diagnóstico y la obligatoriedad de registrarlo.
- Real Decreto 902/2020, de 13 de octubre, de igualdad retributiva entre mujeres y hombres. Establece medidas específicas en materia de igualdad laboral entre géneros, en cuanto a retribuciones, corrección de discriminaciones existentes y promoción de condiciones necesarias para la igualdad.

Pasos para elaborar un plan de igualdad
La elaboración de un plan de igualdad normalmente sigue una serie de fases que pueden aplicarse de manera estándar en cualquier empresa:
- Fase de negociación. En esta primera fase se constituye la comisión negociadora, la cual se encargará de elaborar y aplicar el plan de igualdad en todo el proceso. La comisión está formada por un representante legal de la empresa y un representante legal o sindical de las personas trabajadoras. En caso de que las empresas no cuenten con representación legal de las personas trabajadoras, la interlocución de la negociación la llevarán a cabo los sindicatos más representativos del sector.
- Fase de diagnóstico. En esta segunda fase, se realiza una recopilación y análisis de los datos para conocer el grado de igualdad entre mujeres y hombres en la empresa. Este diagnóstico permite identificar si la empresa en cuestión presenta elementos de discriminación entre trabajadores y trabajadoras y conocer si lleva cabo o no a cabo medidas para paliarlos. La inclusión de la perspectiva de género en este análisis es fundamental para representar de manera real la situación de la empresa. Algunos elementos que se pueden tener en cuenta para el diagnóstico son la participación, la remuneración o el acceso a recursos, entre otros.
- Fase de elaboración. Esta fase, consecutiva al diagnóstico y análisis, permite elaborar un plan de igualdad, definiendo los objetivos, las acciones, el calendario a seguir y los indicadores de seguimiento y evaluación. Para ello, es necesario recabar toda la información extraída durante la fase de diagnóstico, y establecer recursos materiales y humanos para llevarlo a cabo, así como indicar las personas destinatarias del mismo.
Fase de aprobación y registro. En esta última fase, las partes negociadoras aprueban el documento del plan de igualdad resultante, y se inscribe en el Registro de Planes de Igualdad dentro de los 15 días posteriores a su firma.